El oficialismo renueva sólo ocho bancas para diputados y ninguna para el Senado. Y además, arranca mejor posicionado en las encuestas. La duda: cuánto puede impactar una derrota con Cristina.
Por Eduardo Paladini para Clarín
Es política, pero sobre todo matemática. El año próximo, en la parada electoral intermedia, La Libertad Avanza renueva sólo 8 de las 39 bancas de diputados que tiene actualmente. Y ninguna de las 6 que conserva en el Senado. Lo del PRO es bien distinto: pone en juego 22 de los 37 sillas en la Cámara baja y 2 de 7 en la alta.
Contexto general: en 2025 se renueva la mitad de Diputados (127 sobre 257 bancas) y un tercio del Senado (24 sobre 72).
Esta necesidad de mantener cargos es lo que más presiona a Mauricio Macri internamente como jefe partidario. Debe encontrar una fórmula que garantice ya no un triunfo, ni siquiera un empate, sino la derrota más digna para perder la menor cantidad de cargos posible.
Diputados y Senadores que renuevan por provincia en el 2025
Ejemplo: sólo en territorio bonaerense el PRO arriesga 7 diputados. Para conservarlos debería hacer una elección cercana a los 20 puntos. Las encuestas en ese distrito lo ubican (todas) en un dígito.
Inverso a lo de Milei. Por tratarse de una fuerza nueva, LLA pone poco y nada en juego. Dos bancas en la Ciudad (las que consiguieron él y Victoria Villarruel en 2021), dos en Buenos Aires, más cuatro repartidas entre Mendoza, Misiones, Salta y San Luis. Nada en el Senado.
Efecto Cristina
«Para nosotros la elección del año que viene es todo ganancia. Porque vamos a contabilizar las bancas que sumemos. Después, si perdemos o no la Provincia será un tema de los medios», analizaba días atrás ante Clarín un importante funcionario en Casa Rosada.
Sin que mediara pregunta, introducía un elemento que resuena en los análisis. Con forma de duda: qué impacto puede tener para el Gobierno una derrota en la Buenos Aires grande, a manos de Cristina Kirchner.
Para un encuestador muy escuchado por el Presidente, como Federico Aurelio, el riesgo es grande. En particular, por la reacción que pueden tener los mercados ante el fantasma de que la exmandataria intente «volver» en 2027.
Otro consultor muy cercano al PRO coincide: «Ya a partir de abril, puede haber ruido si las encuestas le dan bien a Cristina«.
Desde el Gobierno las señales son divergentes. Algunos funcionarios creen que la expresidenta no se presentará. Otros desean que sí lo haga para profundizar la grieta e intentar la doble carambola: derrotar al kirchnerismo, con Cristina al frente de la boleta, y sentenciar la suerte del movimiento que es actor central de la política argentina desde hace más de 20 años.
Por eso, sin inocencia, dejan correr la posibilidad de que Karina Milei sea quien enfrente a los K. Las encuestas encienden alertas.
1) Por ahora, hablan de un escenario muy parejo en Provincia, con un piso alto para la exmandataria, en torno a los 35 puntos. Es decir, aun con alianza con el PRO, no está tan clara una posible victoria de LLA.
2) Además, los números de la hermana del Presidente no son tan buenos hoy pensando en una candidatura: una reciente encuesta de Synopsis, por caso, la ubica por debajo en imagen de Cristina a nivel nacional.
Primeros números en la Ciudad
En medio de las negociaciones y como anticipó Clarín, Jorge Macri tiene decidido avanzar con el desdoblamiento de las elecciones porteñas. El jefe de Gobierno quiere proteger el distrito cuna del PRO y acordó con su primo Mauricio el adelantamiento.
La jugada revela hasta dónde teme el macrismo que pueda afectarlo el avance libertario en tierra porteña. Las fechas barajadas hablan de junio o julio. Otros dicen que el intendente buscaría abrir el calendario electoral incluso antes.
También se especula con un llamado a una convención constituyente para reformar la Carta Magna local. Esto permitiría adosar una boleta que diga «Macri». ¿Jorge o Mauricio embarrándose en una batalla distrital?
Una nueva encuesta evaluó este escenario partido en tres. Al haber boleta única, habrá pelea para senadores nacionales, para diputados nacionales y para legisladores porteños.
Hoy, la foto es extremadamente cerrada. Según este estudio de CB Consultora Opinión Pública, para la Cámara alta lidera Mauricio Macri (PRO) con 27,9%, seguido por Manuel Adorni (LLA) con 24,1% y Leandro Santoro (UP) con 23,3%. Casi un triple empate. De acuerdo como opere el margen de error, se puede pasar de obtener dos bancas por la mayoría a quedar sin ninguna.
Para Diputados, en tanto, y siempre teniendo en cuenta que se trata de una especulación electoral muy prematura, lidera María Eugenia Vidal (PRO) con 25%, con Mariano Recalde (UP, 20,9%) y Karina Milei (LLA, 19,8%) debajo y muy pegados.
Final abiertísimo.